SISTEMAS PARA AUMENTO DE LAS EXPORTACIONES

El lenguaje de las imágenes, los diseños, los mensajes, los eslóganes, los iconos, los vídeos y el orden en que se despliegan todos estos elementos siempre ayudan en las fases previas de captación de nuevos clientes potenciales. Por ejemplo, algunas percepciones iniciales captadas por el potencial comprador internacional a la vista de la imagen corporativa digital de la pyme exportadora son: posicionamiento de la marca exportadora, características diferenciadoras de los productos que ofrece y calidad de la empresa en cuanto a tamaño, especialización y experiencia internacional.

Todos estos factores de imagen corporativa generan una valiosa impresión en el cliente potencial. En cambio, si no están correctamente ajustados, posteriormente habría que ir a contracorriente corrigiéndolos en las fases sucesivas de la relación comercial si esta llega a continuar. Lo más directo, efectivo y rentable es trabajar suficientemente la imagen corporativa digital de la pyme exportadora desde el principio; es decir, desde el momento en que el cliente potencial la conoce a través de la pantalla de su ordenador o su dispositivo móvil. Podemos decir que sí hay segundas oportunidades para una primera impresión internacional, pero su costo aumenta innecesariamente cuando no existe una hoja de ruta clara que ponga cada pieza en su sitio en el momento preciso.

Que la pyme exportadora tenga unas buenas instalaciones en el área de ventas y fabricación no significa mucho si finalmente ese posible cliente nunca llega a contactar con la empresa porque nada le llamó especialmente la atención de su imagen digital. Por tanto, una primera regla de oro es no dar nunca por hecho que el cliente va a dar el siguiente paso. Al contrario, se deben invertir los recursos adecuados en las fases iniciales de la relación comercial, que son básicamente de naturaleza web.

Una pyme con un gran producto, una marca fiable y una amplia experiencia internacional -pero sin una cuidada plataforma web para fomento de exportaciones- no tiene la garantía de que los usuarios globales de internet perciban de igual forma el peso de dicha marca exportadora. En los primeros pasos del contacto comercial la imagen digital es la que manda. Explicado de otra forma, una pyme exportadora pequeña puede disfrutar de una imagen digital internacional muy por encima de su tamaño real, igual que el caso contrario también se da con mucha frecuencia. Todo depende de la receptividad de los empresarios y gerentes de las pymes exportadoras para pensar como empresas de la nueva economía. La inversión necesaria es menor si se le compara con cualquier otro gasto de representación internacional.

Entonces, ¿cual es el obstáculo principal para tomar la decisión definitiva y beneficiarse de las opciones para incremento de las exportaciones que ofrece la digitalización? Mayormente, depende del nivel de información que tenga la empresa de sus amplias ventajas y de su disposición a contar con una asesoría digital externa especializada que acelere su actualización.